Proporcionar un entorno acogedor y adaptado a las necesidades emocionales y físicas de los niños y adolescentes hospitalizados, así como de sus familias.
El proyecto Acompañando Sonrisas es una iniciativa destinada a mejorar el bienestar de los niños y adolescentes hospitalizados, así como el de sus familias, mediante la mejora de infraestructuras, el apoyo terapéutico y la organización de actividades lúdicas y educativas. El programa busca crear un entorno más acogedor y adecuado a las necesidades de desarrollo de los pacientes, proporcionando momentos de ocio y apoyo emocional en situaciones complejas de salud.
Por ello, se trabaja principalmente en tres áreas: la primera es la adecuación de los espacios de atención pediátrica y neonatal a las necesidades de los niños y sus familias —como la sala de familias de la Unidad Neonatal, la sala de familias de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) pediátricos o el proyecto de adaptación de los espacios y circuitos de urgencias pediátricas para personas con TEA o neurodiversidad—, así como la dotación de equipamientos específicos.
La segunda línea de actuación se centra en el acompañamiento y apoyo emocional a los pacientes mediante actividades terapéuticas complementarias como la musicoterapia o la terapia con perros, elementos que favorecen la adaptación al proceso de enfermedad.
Y, por último, se promueve el aprendizaje y la diversión a través de actividades lúdicas y educativas durante la estancia hospitalaria del niño hospitalizado.
Adecuación y decoración de espacios asistenciales según la edad y desarrollo de los bebés, niños y adolescentes: sala de partos, maternidad, neonatos, urgencias pediátricas, planta de pediatría y UCI pediátrica, entre otros.
Decoración de espacios en días señalados: cumpleaños, Castanyada, Navidad, Carnaval, etc.
Creación de espacios cálidos y acogedores en la consulta externa de pediatría, la unidad neonatal y la UCI pediátrica.
Adecuación de salas familiares en la unidad neonatal y en la UCI pediátrica para que las familias puedan descansar, comer, trabajar y dormir si es necesario.
Acompañamiento y apoyo emocional a los niños y sus familias.
Actividades como musicoterapia, payasos de hospital, terapia con perros y otros elementos que favorecen la adaptación al proceso de enfermedad.
Espectáculos, actuaciones infantiles, visitas de personajes conocidos y cuentacuentos.
Este programa impacta directamente en el bienestar de los niños y adolescentes hospitalizados, pero también mejora la experiencia de sus familias y de los profesionales que los cuidan.

